Runakay

RUNA – ser humano y KAY – Universo es una expresión Quechua que habla de vivir en contacto con la tierra y agradecer sus frutos. Es más que cuidar tu alimentación, es honrar y transformar la naturaleza en algo saludable, moderno y auténtico.

La idea de mezcla y unidad, están en nuestra esencia más profunda y es lo que da valor y sentido a RUNAKAY. RUNA (ser humano) y KAY (universo) es una expresión quechua que nos recuerda que para que haya equilibrio, el ser humano debe ser uno con la naturaleza, respetándola y devolviendo toda la riqueza que ella le regala. Así que solo puedo dar las gracias a la naturaleza por su regalo. Y a ti, que lees esto, por estar abierto a disfrutarlo.

Mi nombre es Juanjo López y soy el gerente y fundador de RUNAKAY, pero para nada siento que este proyecto sea algo solo mío. Este proyecto es de esta tierra, que nos ha inspirado a través de sus múltiples señales y enseñanzas.

¿Cuánta gente desayuna mal por las prisas, por la pereza mañanera, o simplemente porque desconocen cómo debe ser a nivel nutricional un desayuno? Si encontráramos la forma de elaborar un desayuno que cubriera todas las necesidades nutricionales, que fuera rico, que fuera totalmente natural y respetuoso con el entorno, sería perfecto.

Teníamos claro que debían ser 100% orgánicos y veganos y el envase 100% reciclable. Además queríamos honrar nuestras raíces ligadas a nuestras tierras. Recuerdo en mi infancia comer dátiles de postre y tener una energía inagotable para jugar por las calles de Barinas, y recuerdo a mi abuela prepararme la leche del desayuno a base de almendras trituradas porque era intolerante a la lactosa.

Estos sabores siguen estando ahí, como base de RUNAKAY, como legado de unos tiempos, donde sin saberlo, sabíamos muy bien como cuidarnos.

Mi mujer a su vez, proviene de Oña, un pueblecito de la Cordillera Andina donde se cultiva desde hace siglos quinoa, café… Ingredientes presentes en sus desayunos porque otorgan energía y vitalidad para los largos días de montaña.

De ahí surgió toda la fuerza y energía para crear el Batido Bio y Vegano RUNAKAY, un proceso que tuvo dos años de desarrollo hasta encontrar el equilibrio perfecto entre Proteínas, Carbohidratos y Vitaminas que el cuerpo humano necesita para sentirse bien, siempre Sin Lácteos, Sin Gluten y Sin azúcares añadidos.