En estos tiempos inciertos, cuidate con productos naturales como la miel.
La miel es una sustancia natural alimentaria producida por las abejas a partir del néctar de las flores, ellas lo transforman al mezclarlo con sus propias sustancias, las enzimas; esta mezcla es almacenada en los panales de la colmena donde, después de un periodo de maduración, se obtiene la miel.
Dependiendo de la variedad de las flores y del tipo de colmena, la miel ofrece más de sesenta sustancias diferentes, entre ellas encontramos los minerales, aminoácidos, falvonoides, enzimas, las vitaminas y un largo etc.
La miel favorece la producción de energía por su gran aporte en azúcares, glucosa y fructosa, dos elementos que proporcionan energía en pocos minutos. Gracias a esto ayuda al organismo a restablecer su ritmo de actividad habitual y mejora el riego coronario al aportar energía a la musculatura cardíaca, favoreciendo la producción de fosfatos orgánicos.
Dependiendo de las flores de las que proceda poseerá unos u otros efectos terapéuticos:
- De romero: es tonificante, expectorante y favorece el funcionamiento hepático.
- De tomillo: es antiséptica y digestiva.
- De espliego: es sedante y expectorante.
- De bosque o encina: es ideal para el asma y la bronquitis.
- De azahar: goza de efectos sedantes y conciliadores del sueño.
- De eucaliptus: está indicada para tratar catarros y gripes.
- De brezo: es rica en hierro e ideal para las anemia.
- De espliego: tiene propiedades tónicas y antiinflamatorias que alivian la tos y la laringitis.
Fuente: mieles muria